Los niños inquietos y los niños temerosos son los que actualmente dan más quebraderos de cabeza a los educadores y a los terapeutas.
¿Cuáles son las ideas directrices que nos pueden orientar en la educación de los niños inquietos o hiperactivos y que deberíamos tener en cuenta ya en la edad preescolar?
¿Cuáles son las palabras clave orientadoras que son aplicables en la educación de los niños temerosos y vacilantes?
Por otra parte, ¿Cuál es el trauma primordial del niño triste-caviloso? ¿Dónde nace realmente en el niño el tan necesario "sentimiento de autoestima"?
En el libro Como educar a los niños temerosos, tristes o inquietos, Henning Köhler nos descubre que todos estos problemas están directamente relacionados con deficiencias en el desarrollo de los sentidos volitivos (tacto, vital, del movimiento y del equilibrio) en la primera infancia y nos da inestimables indicaciones de cómo cultivarlos.