Un día Sara se encontró un patito que acababa de nacer. Se lo llevó a su casa y lo cuidó. Siempre estuvo a su lado mientras creció y los dos se convitieron en grandes amigos. Pero un día animal oyó la llamada de los patos salvajes y Sara se dio cuenta de que tendría que enseñar a su pequeño amigo a volar. Una historia preciosa y conmovedora, con unas bonitas ilustraciones y narrada con una gran delicadeza.